miércoles, junio 22, 2011

MORBID ANGEL- Illud divinum insanus (2011)

A estas alturas -y eso que el disco salió hace sólo un par de semanas- todo el universo metalero sabe ya cómo es el último álbum de MORBID ANGEL y muy probablemente sea el disco más descargado de los últimos tiempos, o el que más deprisa y con más voracidad ha sido buscado por hordas de metalheads hambrientos tras ocho años de espera. Y a estas alturas ya no debe haber un solo aficionado que ignore la gran sorpresa que ha supuesto. El terrible impacto de ver juntos en un mismo disco temas razonablemente clásicos dentro de su estilo y otros totalmente experimentales y modernos. Herejía, claman muchos. La descomunal espera ha sido igualada y superada por el no menos descomunal revuelo que se he levantado de forma casi inmediata. Los dioses caídos, la traición suprema, el caos, la debacle, el final de la humanidad o poco menos…

Y como el disco está oído y requeteoído más o menos por todo el mundo, una reseña no aportaría nada que la gente no sepa ya, así que… Miremos un poco más allá, hacia los motivos que pueden estar detrás de este curioso giro, si es que los hay y realmente no hay que creer la ingenua candidez con que Dave Vincent proclama que “les apetecía hacer un disco así, sin más”. Pero incluso en ese caso hace falta una pequeña revisión crítica del disco, una mínima reseña, casi una disección, porque me temo que ambas cosas, la música y la estrategia de presentación elegida, van unidas.

De los 11 temas del disco hay sólo cuatro “raritos”, así que el escándalo y la conmoción no deberían ser para tanto. ¿O sí? En realidad esos cuatro temas ello solos superan los veintiséis minutos de duración, mientras que los cinco temas “normales” o tradicionales se quedan en algo menos de veinticuatro. Aparte, el tema final sólo tiene un minuto y medio medianamente chocante, así que se puede añadir a la última lista y ésta rondaría ya los veintiocho minutos. La intro -birriosa como pocas- no cuenta ni en un grupo ni en otro, porque es tan insulsa que lo mejor es ignorarla por completo; su total ausencia de un crescendo, un clímax, una tensión ascendente que desemboque en el primer tema (es decir, lo propio de cualquier intro), la puede emparentar con los monótonos y faltos de relieve temas experimentales. Al final la cosa queda mitad y mitad.

Los temas tradicionales compuestos al estilo conocido y que les dio gloria en sus inicios no están mal, qué caramba. No son una maravilla pero no están mal. Tienen blasts (y Tim Yeung está impresionante), riffs poderosos, sonido agresivo y están cortados por el estricto rasero del Death de Florida más purista. Ahí viene precisamente el primer mosqueo, pero en eso entraré luego. Los temas nuevos, raros, provocativos son… todo esto y más cosas. Distintos, experimentales, imprevistos… “Too extreme” es abierta y deliberadamente machacón, “I am morbid” es Heavy Metal de libro, “Destructos Vs. The Earth” es industrial y suena a Rammstein, y por último “Radikult” parece un tema de Marylin Manson. Vaya panorama. Pero siendo justos hay que decir que todo ellos, cada uno en su campo, están logrados.

¿Entonces? ¿Al final el disco es un “dos en uno”, un conjunto con partes escindidas, una balsa de aceite sobre agua? Así es. No hay fusión ni mezcla ni estamos ante una música híbrida, y de hecho no se puede decir ni por asomo que MORBID ANGEL hayan dejado de componer, tocar y grabar genuino Death Metal americano. Pero al lado, como un pegote irreconciliable, han colocado… eso otro.

Así que no queda más que preguntarnos, ¿por qué? ¿Con qué intención lo han hecho? Porque algo así nunca es casual, y mucho menos viniendo de los padres del Death o al menos uno de sus mayores estandartes, y mucho menos aún tras un largo período de ocho años y una anhelante espera de intensidad proporcional. ¿En qué estaban pensando? ¿No sabían lo que iba a pasar? Lo lógico es suponer que sabían cómo reaccionaría el público, sabían que esta amalgama imposible cabrearía a mucha gente y que amplios sectores se llevarían las manos a la cabeza escandalizados. ¿Entonces?

Entonces hay que volver a la escucha de los temas “tradicionales” y retomar el mosqueo al que me referí antes: esos temas por sí solos no son propios de una leyenda como MORBID ANGEL, ni siquiera lo serían de muchos grupos que empiezan en la actualidad y que ofrecen trabajos más personales e intensos. Y no hay peor cosa que la indiferencia. Nada peor que no levantar pasiones tratándose de un grupo de su envergadura, no provocar reacción alguna, perderse en el olvido tras toda una carrera, diluirse sin dejar una honda huella perdurable… como la que han logrado magistralmente con este “Illud divinum insanus”.

Quedará ese como el mayor logro del disco: haber sido un hito de la historia reciente del Metal extremo en cuanto a capacidad de convocatoria y de generar interés, causar controversia, motivar tomas de partido radicales y hacer estallar exabruptos por medio mundo. No está mal. Salvo alguna diva del Pop que una y otra vez conseguía promoción planetaria gratis escandalizando siempre con los mismos temas a la Iglesia y a la sociedad más puritana, MORBID ANGEL se han convertido en los más sagaces estrategas de la historia musical reciente, claro que sin llegar a las cotas de difusión de la susodicha. Pero al menos se habla de ellos, “aunque sea para bien”.

2 comentarios:

Esteban dijo...

Gracias por tu comentario. Me ha parecido muy interesante. No concuerdo eso si en eso de que "los temas experimentales están bien logrados en sus estilos"

Nooo... quizás I am a Morbid sea la única. Pero "Too extreme","Destructors Vs the earth" y por sobre todo "Radikult" son canciones excesivamente largas y caricaturas de los estilos que pretenden desarrollar.

Yo soy amante de los experimentos. Me fascina cuando las bandas se juegan el pellejo pero acá Morbid Angel ha salido mal parado ya que , me parece, la jugada ha sido mal planteada y desarrollada. Si los temas "a lo Rammsteim" les hubiesen quedado BUENOS, todos nos rendimos pero lamentablemente creo que no fue así.

Saludos!!!!!

P.I.G. dijo...

Hey! Muchas gracias por dejar un comentario y mostrar tus opiniones! Seguramente tienes razón en no compartir la idea de que los temas industriales estén bien logrados, la verdad es que no son estilos en los que yo esté muy metido y no soy el más indicado para hacer esa apreciación, así que en parte supongo que me pasé de listo, jaja! Pero bueno, desde mi limitado conocimiento no me parecían un completo desastre, a eso me refería. "I am morbid" es Heavy de toda la vida, eso sí, y desde ese punto de vista no está nada mal, pero claro, oír a Morbid Angel haciendo Heavy... uff:P

Gracias y un saludo!