Curioso disco: los quince primeros segundos parecen el principio del “Kill’ em all”, nada que objetar sobre eso porque tampoco es nada del otro mundo. Luego el siguiente minuto y medio es el principio del “Hell awaits”, con sus mismos ritmos y sus riffs casi iguales y su mismo cambio final al desembocar en la parte rápida y principal del tema. Esto ya empieza a oler mal. Pero es que lo que viene después sigue en la misma línea: refrito del tema de SLAYER sólo que con una voz más bronca y oscura y menos agresiva, pero los cambios, las líneas vocales, los riffs con trémolos de una nota… todo es demasiado parecido como para pasarlo por alto.
En realidad el riff principal de este tema, cuando empieza la parte rápida, se parece más a los del “Pleasure to kill”, y de hecho el resto del disco se dedica a hacer esto mismo, escupir riffs sacados de los primeros dos discos de KREATOR y cruzarlos con SLAYER, voz macarra aparte. No está mal, veinticinco años después y a alguien se le ocurre que puede estar bien imitar, plagiar o robar precisamente a los grupos más emblemáticos, pioneros e influyentes de la música extrema de ambos lados del Atlántico y, no ya que no se va a notar, sino que es un buen planteamiento. Supongo que, al igual que a los miembros de la propia banda, habrá gente a quien también se lo parezca.
Temas como “Cry havoc”, “Alcoholy terror” o “Lex talionis“ hacen poco o ningún favor al disco y al propio grupo. Sí, todo suena muy intenso y dan caña por un tubo, pero no hay absolutamente nada valioso en lo que se refiere a composición de temas propios, a la faceta creativa del grupo, y no veo qué sentido tiene montar un grupo con tal intención en lugar de hacer una banda de versiones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario