Ya sabíamos que hay muchos animales en el mundo del Black Metal… perdón, reharé esa frase: ya sabíamos que muchos animales parecen músicos de Black, o que muchos músicos de Black se parecen a determinados animales, no tengo claro si es lo uno o lo otro, pero es innegable que a veces vemos gatos que parecen mensajeros de Belzebú, o que el oso panda es el más true de los seguidores del corpse-paint, y que hay otros bichejos que le andan cerca, como los mapaches, y la lista podría seguir pero lo vamos a dejar con la variante tipo tejón, otro inspirado animalillo en cuestiones de maquillaje facial.
Pero lo que nunca se me habría ocurrido es que el origen de todo, la procedencia genética de tanto quemaiglesias, los ancestros de los adoradores noruegos de Satanás fueran… ¡una simple rana!
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